Cosmética canina
La enorme importancia económica y sociológica que el mundo del perro adquiere en las modernas sociedades desarrolladas ha permitido la investigación y desarrollo de áreas que, a primera vista, pudieran parecer superfluas o marginales. Por otra parte, la similitud fisiológica comparada, entre el organismo del ser humano y el del perro, permite la adopción de medicamentos, fármacos y diversos productos químicos que son válidos para ambas especies, efectuando la dosificación en función de los diferentes pesos en gramos o miligramos de materia activa por cada kilogramo de peso vivo del organismo considerado.
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El mundo de la cosmética, productos de belleza corporal, íntimamente ligado al sector farmacológico, ha experimentado paralelamente a éste un notable incremento en cuanto al nivel de aceptación de la demanda. Hoy día, en cualquier comercio especializado en animales domésticos o en las secciones correspondientes de los grandes almacenes, podemos encontrar un número ilimitado de jabones sólidos y en forma de gel, ‘champús’, lociones, colonias y un larguísimo etcétera de elementos y productos pensados y dirigidos al perro a través de la sensibilidad de sus amos. Está claro que los canes no tienen opción de elegir una u otra loción, ni siquiera pueden manifestar sus preterencias sobre determinado jabón líquido, siendo su amo y cuidador el que en virtud de sus propias apetencias, decide el uso de algún producto en su animalito de compañía.
Jabones y champús
El uso de estos productos, asegura una profunda limpieza de la capa o pelaje de nuestros perros durante los baños, generalmente poco frecuentes, y ayuda a mantener un aspecto más adecuado a cada tipo de pelo. Los champús secos que pueden utilizarse para limpieza de los animalitos sin necesidad de mojarles con agua, son especialmente útiles para los cachorros hasta que ‘pasan’ la época de las vacunaciones y pueden ser lavados. Las razas de compañia son sometidas con mayor frecuencia a baños jabonosos más o menos desodorantes o perfumados, que no rindan desagradable la presencia del can en un pequeño apartamento.
Las razas de guardería y utilidad, así como aquellas de caza que viven en espacios abiertos o a la intemperie, raramente son bañadas con frecuencia, pero, sin embargo, son potenciales consumidoras de otras especialidades cosméticas.
Lociones
En la descripción de cuidados que requieren la mayoría de los perros que comparten nuestro entorno, se suele hacer especial hincapié, en el cuidado del pelo. El cepillado diario se aconseja de forma reiterativa, incluyendo o no la conveniencia de acompañar una loción bactericida que evite fermentaciones de residuos acumulados entre el pelo, que tenga un olor agradable
nunca intenso, ni penetrante como para poder alterar el fino olfato de los perros e incluso que presente también cierta acción insecticida profiláctica, frente a la eventual colonización de pulgas o garrapatas y otros parásitos externos.
Si el uso de jabones más o menos sofisticados puede ser sustituido por otros productos, las lociones son, a nuestro juicio, eficaces auxiliares que permiten tener animales más sanos, más limpios y agradablemente perfumados. Sin embargo, siempre han de seguirse al pie de la letra las indicaciones que acompañan a cada uno de los productos y, sobre todo, atender a las posibles contraindicaciones que pudieran mencionarse en los prospectos respectivos.